viernes, 29 de junio de 2018

Dulces juegos de identidad

Talleres del Metro de Málaga

Cuando empezaron a confundirme con Carlos mi vida cambió. 

En el metro, una exnovia de Carlos empezó a gritarme que volviera con ella, un matón me dio una semana para pagar mis deudas y una anciana sacó un revólver mientras decía “Lo pagarás caro, Carlos”.

Llegué a casa desesperado, llamé y abrió una mujer que debía ser mi esposa.         

̶ Usted no vive aquí, si sigue molestando llamaré a la policía.

Ahora duermo en la calle, todavía oigo que murmuran “Pobre Carlos”. No sé cómo decirles que soy otro, alguien que perdió un metro que no ha vuelto a pasar.




Accésit en el III Certamen de Microrrelatos 100 palabras en un Metro organizado por el Metro de Málaga.Noticia en malagamagazine.esNoticia en europapress.es

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