viernes, 30 de junio de 2017

Quisimos tanto a Yolanda (Fragmento)

Quisimos tanto a Yolanda ha quedado finalista en el XVII Concurso Cuentos sobre ruedas de Alsa


El profesor Sanz, que nos daba matemáticas y tenía voz de ogro, me dijo que hablara más alto, que me levantara, que fuera un hombre. Yo me levanté, el silencio dentro del autocar era tan grande que podía escucharse mi respiración. Todos me observaban. Yo vi a uno de aquellos indeseables, a uno de los amigos de Yolanda, mirarme como se mira a un perro de la calle.
― Digo que yo dejé de ver a Yolanda cuando pasamos el túnel.
Sanz volvió a rugir.
― ¿Túnel? ¿Qué túnel? ¿El túnel de Guadarrama? ¿Pero tú eres idiota o qué?
Las risas estallaron, el amigo de Yolanda cambió la ira por la chanza, me llovieron insultos, comentarios sobre el tamaño de mi cabeza y el de mis gafas, alguien me dio un puñetazo en el brazo y alguno me abrazó como el que abraza a un borracho.
Los profesores bajaron del autobús, ninguno estaba seguro de que Yolanda hubiera entrado en el vehículo, nadie había pasado lista cuando llegamos y ella fue la primera en subir, pero solo yo la había visto, yo y aquella panda de golfos.

Excursión (A.Palacios)

martes, 27 de junio de 2017

El paraguas rojo (Fragmento)

El fin de semana pasó sin pena ni gloria, seguramente salimos a comer o al cine. No hablamos del paraguas en ningún momento, pero seguía en su esquina como si esperara algo o como si siempre hubiera estado allí.



El lunes amaneció lloviendo y pensé en llevarme el paraguas, podía ser una buena manera de sacarlo de casa y quizás dejarlo olvidado en algún taxi o en una cafetería, pero cuando fui a cogerlo sentí muy dentro de mí que no debía hacerlo, así que, después de mirarlo un instante, lo dejé donde estaba y cogí el mío.